Vilagarcía fue la estación término del primer ferrocarril de Galicia (1873), que unía Santiago de Compostela con su “puerto natural”. Hoy, aquella vieja estación se ha convertido en museo para recordarnos a todos la importancia de los caminos de hierro. En ese trayecto hacia el pasado estaremos acompañados de maquetas, paneles, proyecciones y hasta juegos interactivos. Por supuesto, no faltan las reproducciones de trenes a distintas escalas. El museo cuenta con el reconocimiento de calidad turística SICTED (Sistema Integral de Calidad turística en Destino), que acredita una apuesta clara por la calidad y mejora continua de la experiencia turística.